viernes, 11 de abril de 2014

BARTOLOMÉ DE LOS MÁRTIRES


Arzobispo de Braga, Padre del conc. de Trento, teólogo eminente y celosísimo pastor de almas, n. en Lisboa, en mayo de 1514, y m. en Viana do Castelo, el 16 jul. 1590. Ingresó en la Orden de Santo Domingo en 1528. Cursó sus estudios en el Colegio Universitario de Santo Tomás de Lisboa, terminando en 1538. Enseñó Teología en el convento de Nuestra Señora de la Victoria da Batalha, hasta su elección (1558) para arzobispo de Braga. Consagrado en 1559, se dedicó a la acción pastoral en su Iglesia. Convocado el conc. de Trento (3.ª Época) fue el primer padre transalpino que llegó a Trento (18 mayo 1561). En el concilio defendió acérrimamente la primacía de su Iglesia. Fue notable su acción como teólogo, destacándose sobre todo por su celo en una reforma rigurosa de la Iglesia. Fue el primer obispo de la Cristiandad que puso en práctica los decretos conciliares, en el sínodo bracarense de 1564. En 1566-67 celebró el IV conc. Provincial Bracarense para adaptar a su metrópoli los decretos tridentinos, que instauró a pesar de obstinadas oposiciones. Los capítulos mayores de su obra de pastor y reformador son la formación del clero, en el seminario, que había fundado y en las cátedras de casos de conciencia, instituidas en Braga y en Viana do Castelo; La instrucción de la juventud, reorganizando el Colegio de San Pablo, que llegó en su tiempo a tener más de 1.000 alumnos; la catequización de los fieles, escribiendo al efecto un catecismo para los párrocos, considerado el de mejores características pastorales de su siglo; la moralización pública y la rigurosa administración de los bienes eclesiásticos, empleados exclusivamente para fines pastorales y para socorrer los pobres, «sin atesorar nada». Su espíritu de caridad y de pobreza llegaron al heroísmo durante la peste de 1570 y en la carestía de 1574. En la crisis de la sucesión de 1580, por muerte del rey Sebastián de Portugal, B. conservó la neutralidad aguardando el fallo de los jueces constituidos por las Cortes de Almeirim. A insistencia de Felipe II de España, reconocido ya heredero de la corona de Portugal, participó, con los demás prelados y nobleza del reino, en las Cortes de Tomar, reafirmando en ellas la primacía de su Iglesia. Después de porfiadas instancias, Gregorio XIII le aceptó la resignación de su cargo a fines de 1581. B. la ratificó en 20 feb. 1582. Por muerte de su sucesor, y a pesar de que se encontraba enfermo y viejo, el pueblo suplicó al rey y al Papa que fuera repuesto en su arzobispado, por su caridad con los pobres y su santidad. A su muerte, los vianeses tuvieron que guardar armados su cadáver para evitar que lo arrebataran los bracarenses. Incoado el proceso de canonización, se publicó el decreto de la heroicidad de sus virtudes en 1845. Considerado por todos un religioso de estricta observancia y proclamado, aun en vida, hombre de eminente santidad, B. fue una de las máximas figuras de la Iglesia del s. XVI, por su cultura teológica, por su actuación en el conc. de Trento, por su obra de reforma de la metrópoli bracarense, y por su influencia en S. Carlos Borromeo, de quien fue el gran modelo de pastor y consejero espiritual y apostólico.
      Obras. Destacan, entre más de 30 títulos: Stimulus Pastorum; Compendio de Doutrina Espiritual, compuesto en lengua latina... y traducido en castellano por el P. F. Plácido Pacheco Ribeira... Valladolid 1601; Catecismo de Doutrina Christiana e de Practicas Spirituales... traducido por el P. Fr. Manuel Rodrigues Lusitano, Salamanca 1606. Con el título de Opera Omnia, publicó D'Inguimbert, 2 vol. ( 1734-35) que, además de las obras mencionadas, recoge: Summa Conciliorum Omnium; Annotationes in Davidicos Psalmos; Petitiones in Concilio Tridentino faciendae; Collecta ex gestis in Concilio Tridentino (Notas de los hechos del Concilio de Trento); ltinerarium Bracarae Tridentum. La publicación de sus escritos inéditos de Teología, está en preparación y proyectada en 11 volúmenes. Sus restantes escritos se consideran perdidos.
     
BIBL. : J. DE CASTRO, Portugal no Concilio de Trento, Lisboa 1944-46; J. A. FERREIRA, Fastos Episcopaes da Braja Primacial de Braga, Braga 1928-35; L. DE GRANADA, Vida de D. Fray Bartolomé de los Mártires..., en Obras, X1V, Madrid 1906, 323-366; L. DE MUÑOZ, Vida de D. Fray Bartolomé de los Mártires..., Madrid 1645; R. DE ALMEIDA ROLO, Obispo e a sua missao pastoral segundo D. Fr. Bartolomeu dos Martires, Oporto 19ó4; L. DE SOUSA, Vida de D. Frei Bartolomeu dos Martlres, Lisboa 1946.


R. DE ALMEIDA ROLO.

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